Hotel Guiren

Un poco viejo el hotel. Cama comoda. Bar poco servicio y regulsr

La habitación vieja y polvorienta. El desayuno escaso y personal que te atiende muy extraño. Las calles proximas siniestras. La situación de la zona es buena, junto a la estación central.

A Nápoles hay que ir con una mentalidad abierta. Al principio puede asustar, hasta que te adaptas a caminar por las callejuelas del centro y dónde ves el verdadero Nápoles.
El hotel Guiren está a cinco minutos caminando de la estación de tren (de verdad, cinco minutos). Tardas más en los pasos de peatones esperando que los coches te dejen pasar que caminando. El hotel tuvo una época mejor, antes de que hacia Piazza Garibaldi estuviese ocupada por un mercadillo subsahariano. Durante el día mejor rodearlo, De noche me pareció más controlable.
En el hotel, la limpieza es irreprochable. El personal atento. Las habitaciones del primer piso son las de tiempos mejores (las ví cuando limpiaban) y las del segundo son de hostal (con baño, aire acondicionado, wifi, secador de pelo, etc) pero impersonales y pequeñas.
Si no quieres sumergirte en Nápoles, el hotel Guiren no es lo tuyo.
La relación precio-calidad es buena, y la ubicación si piensas recorrer los alrededores de Nápoles (Pompeya, Herculano, Vesubio, Capri, etc.), inmejorable.
Mi consejo: no llames la atención.

La zona es peligrosa. 3 minutos despues de salir por primera vez del hotel vimos que le estaban abriendo la mochila a un turista. Alertamos al turista de lo que estaba sucediendo y los ladrones nos amenazaron.
Nápoles es una locura con el tráfico. Las motos por las aceras, dan igual los semáforos o las direcciones de las calles. En resumen: a poco que aprecies tu tranquilidad o tu vida no vayas a esa ciudad.

Mi pareja y yo cogimos este hotel de paso para no conducir mucho y ver así otra ciudad de Italia antes de llegar a nuestro destino. Cual fue nuestra sorpresa que al llegar por esa zona había muchas personas extrañas (como unas 20) en la misma calle del hotel que no paraban de mirarnos y se acercaban al coche que lo teníamos lleno y además matrícula española. Fue tanta la inseguridad que percibimos que nos fuimos de allí. No entramos ni al hotel y eso que habíamos pagado parquin privado en las inmediaciones. Después nuestros amigos italianos nos han dicho que esa es una de las peores zonas de Nápoles. Que ya de por si la ciudad no cuenta con mucha fama como para ir a esa zona. Así que recomiendo otra zona de la ciudad o ir a Pompeya que menudo cambio de ambiente jejeje.